viernes, 19 de febrero de 2016

Roberto Weill del Salón de la Fama Latino al sueño del Clásico Mundial de Beisbol



              Todos alguna vez en la vida hemos tenido sueños y esperanzas, las grandes hazañas del ser Humano se han logrado por sueños e ilusiones de querer alcanzar objetivos. Marco Polo, Cristóbal Colón, Neil Amstrong, entre muchos otros han soñando en alcanzar grandes objetivos y lo han logrado quizás con la desaprobación y la crítica de muchos.

                Todo aquel que sueña despierto con lograr grandes hazañas  ha sido alguna vez en su vida tildado de loco y más de uno  ha tratado de troncharle el camino para alcanzar sus sueños. Hasta la misma familia en muchas ocasiones te desalienta  diciendo.  Nunca lo vas a lograr,  En un libro el cual suelo leer cada cierto tiempo llamado  “Si No está roto Rómpalo” los autores R.J Kriegel y L pautler, denominaban a estas personas Chorros de agua.

                Hace ya algunos años vengo escuchando el nombre de Roberto Weill, a quien no tengo el placer de conocer ni el privilegio de compartir palabras con él,  solo vengo siguiendo muy de cerca sus esfuerzos por lograr el sueño de tener un Salón de la fama donde se  represente lo mejor de lo mejor del talento latino que participó en la MLB. 

                Al día de hoy ese sueño ya se ha hecho una realidad, una realidad tal que el salón de la Fama Latino,  el pasado año presentó su  sexta exaltación  y entre ellos estaba la Figura de Sammy Sosa, para muchos el Más grande jugador  latino  que ha pasado por las grandes ligas,  la magnitud ha sido tal que estas exaltaciones cuentan con el apoyo televisivo de la cadena ESPN,  todo realizado de una manera organizada  con el apoyo incondicional del público y cumpliendo con los requisitos del Salón de la fama de Coopesrtown  y la liga organizada de beisbol MLB.

                Esta vez El Sr Weill, desea embarcarse en otro gran sueño, el desea que República Dominicana,  país campeón del Clásico mundial,  Invicto. Sea el organizador de por lo menos una ronda de la exigente competencia mundial, Para un país netamente beisbolero y caribeño como Republica Dominicana, Puerto Rico, Cuba, Venezuela,  el clásico mundial de beisbol,  es su copa Mundial de futbol. El solo hecho de reunir en un mismo equipo los mejores jugadores del país que participan en las ligas más exigentes  de la disciplina es mayor atractivo que cualquier Juego panamericano, mundial de baloncesto o hasta unos juegos olímpicos.

                Recientemente han salido a la palestra pública personalidades ligadas a la liga profesional invernal Dominicana,  haciéndole la contra al sueño de Roberto Weill, tratando de organizar una propuesta a última hora, sin ningún tipo de estructura ni evidente organización y  sobre todo cuando ya la fecha límite de entregar las propuestas cerro, evidentemente estas personas lo que demuestran es una baja calidad moral y lo único que buscan es el beneficio profesional  a costa de perjudicar a la República Dominicana, ya que al momento que MLB conozca la situación podría ser una excusa para descartar hacer negocios con un país donde sus mismos ciudadanos no pueden apoyarse y donde ya hay una campaña desinformativa indicando que el evento es muy costoso para la población. Razón que para mí no cuenta  con ninguna lógica  ya que hace más de 10 años se montaron unos juegos panamericanos, donde asistieron más de 30 países así como más de 5,000 atletas y podemos decir que fueron un éxito.

                La MLB, no solo exige tener un estadio en condiciones apropiadas. Ellos solicitan cumplir con más de 110 requisitos entre los cuales podemos mencionar:  Seguridad, Medio ambiente, Organización, infraestructura Hotelera  entre otros,  muchos de  los cuales lamentablemente brillaron por su ausencia en la pasada  serie del Caribe que organizó la Lidom, junto con la confederación del Caribe y la compañía promotora CDD, requisitos que el Sr Weill, indica que ya los tiene resueltos  e inclusive el pasado mes de enero se pudieron ver personalidades de MLB echando un vistazo al estadio francisco Michelli, de la ciudad de la Romana. Estadio en el cual se ha elegido para montar el evento.

                Entiendo que para que República Dominicana, pueda lograr el sueño  de poder tener a su equipo campeón mundial defendiendo los colores y el orgullo de su bandera en su tierra  y tenga una verdadera fiesta de beisbol  todos los Dominicanos, debemos  de tocar la misma nota y apoyar  el mismo objetivo.